La cocina de Marina
«Comer bien hace amigos y si cocinan juntos, al igual que los ingredientes al fuego de la cazuela, los lazos del cariño se estrechan y se hacen más consistentes y sabrosos, como debe ser». Marina
En aquel curso se aprendió a cocinar: estofado de carne con patatas y alcauciles; sopa de acelgas con patatas como me la contó Isabelo; tronchos de acelgas rehogados con patatas y zanahorias; caldereta de guisantes con ternera; patatas vascas al estilo de mi abuela que era de Alonso; lentejas o alubias pochas; filetes de pechuga de pollo encebollados como los hacía Rosi; lomo de cerdo a la sal y al horno; trufas de chocolate como las aprendí de Rosa.